Entrevista a Miguel León-Portilla sobre su nuevo libro La filosofía Náhuatl (Croacia)
Muchas gracias por dedicarnos su tiempo prof. León-Portilla. En primer lugar querríamos saber ¿qué despertó su interés por las antiguas culturas pre-hispánicas?
1. Siendo muy joven, pude leer libros momo la Historia antigua de México del jesuita del siglo XVIII Francisco Javier Clavijero. Las obras de éste habían sido traducidas al italiano, francés y alemán. Además desde niño visité varias zonas arqueológicas con el iniciador de la moderna
antropología de México, el doctor Manuel Gamio. Así fue como desde joven me sentí atraído por las antiguas culturas indígenas y también por los descendientes de esos pueblos creadores de una civilización. Manuel Gamio me decía: -no sólo pienses en el indio muerto, preocúpate también por el indio vivo.
– ¿Qué le llevó a explorar el pensamiento filosófico entre los nahuas?
2. Leí algunas traducciones de textos náhuatl hechos por Ángel María Garibay, mi otro gran maestro. Aparecían preguntas y cuestiones como estas: ¿Podemos decir palabras verdaderas en la tierra? ¿Qué hay más allá de la muerte? ¿Por qué se esconde el Dador de la vida? ¿Es posible dar un rumbo al corazón en la tierra? Preguntas como estas me parecieron como las de algunos
filósofos preclásicos. Cuando leí lo escrito por Garibay estudiaba en California y ahí hice mi tesis de maestría sobre la obra de Henri Barsong Las dos fuentes de la moral y la religión. Es un libro extraordinario, tanto filosófico como poético.
– ¿Qué elementos de la filosofía náhuatl destacaría por su particular visión práctica y útil para el hombre de hoy y los tiempos en los que vive?
3. Pienso que interpretar la existencia como una realización de Flor y canto es decir con fundamento en una visión poética del mundo, tiene un significado perdurable hasta el presente. Hay muchos textos sobre todo de los Huehuehtlahtolli, testimonios de la antigua palabra, con ideas relevantes para los hombres y mujeres actuales. Recordaré una sola: ¿Es que en la tierra solo hemos venido a sufrir? ¿Qué es lo que puede darnos una cierta felicidad? Así lo dejaron dicho los ancianos: para que no suframos, el Dador de la vida nos dio la risa, nuestra robustez, los alimentos, el sueño y el acto sexual por el cual se siembra de gentes en la tierra. Todo esto es consuelo para el hombre. Pero si muchas cosas resultaran mal, sin embargo no por eso hay que vivir siempre llorando. Se busca mujer, se busca marido, hay águilas y jaguares.
– Su libro La filosofía náhuatl indudablemente prueba el florecimiento de las culturas pre-hispánicas que no fueron a la zaga detrás de las culturas del Viejo Mundo. En la actualidad, ¿los descendientes de los antiguos nahuas son conscientes de su gran patrimonio cultural?
4. Los descendientes de los antiguos pueblos indígenas han quedado durante muchos años en una situación verdaderamente dramática. Así tan sólo hace pocas décadas algunos de ellos han tenido acceso a universidades y a otros centros de educación superior. Ahora ellos también participan en el rescate de sus culturas.
– Usted ha escrito muchos libros, ¿cuál es su favorito y por qué?
5. Entre los libros que he escrito que pienso pueden ser de interés están: La Filosofía náhuatl, Visión de los vencidos, Los antiguos mexicanos
a través de sus crónicas y cantares, Toltecáyotl, aspectos de la cultura náhuatl y Tonantzin Guadalupe. Me parece que pueden ser de interés porque nos revelan aspectos muy valiosos de la cultura espiritual de los antiguos mexicanos.
– Es bien sabido que usted está muy comprometido con la preservación del Patrimonio cultural mesoamericano ¿puede decirnos algo más sobre esto?
6. Efectivamente creo estar comprometido con la herencia de los pueblos indígenas y con la situación actual de sus descendientes. Son ellos la raíz
más honda en el ser cultural de México. Todavía hoy tienen mucho que enseñarnos en su respeto a la naturaleza, a su sentido comunitario, su amor a la familia, en no tener ambiciones por riquezas económicas, en fin por sonreír ante la vida, a pesar de injusticias y sufrimientos.
– ¿Le gustaría dar un mensaje a sus lectores en Croacia?
7. Croacia y México han tenido relaciones por lo menos desde fines del siglo XVII y luego más intensas en el XVIII. Ello ocurrió por la presencia de evangelizadores croatas, jesuitas, que trabajaban en México entre los pueblos indios del noroeste del país. Mencionaré al menos a uno. Fernando Konsag (1703-1759), nacido en Verazding. Trabajó bastantes años en la Península de California cuyas edificaciones hasta la fecha se conservan. Se conocen con el nombre de San Borja. Escribió también varias obras, una acerca del descubrimiento de la costa oriental de la Península de California y otros trabajos. Hace pocos años celebramos en California muchas de sus grandes contribuciones. Pienso que es bueno que los mexicanos y los croatas tomemos conciencia de esto.