Modelar una pieza en barro implica concentración, creatividad, equilibrio y también puede despertar reflexiones filosóficas.
Con ese objetivo, la sede de Nueva Acrópolis en São Caetano do Sul/SP, se llevó a cabo el Taller de Cerámica, dirigido por la profesora Vera Luz.
Según ella, el barro brinda una buena integración con la Filosofía, porque es maleable y “ …nos mueve internamente, requiere dedicación, momentos de silencio, concentración, varias cosas que nos ayudan a comprendernos un poco más a nosotros mismos”.
El formato elegido para crear las piezas fue la llave Ankh o llave de la vida, un símbolo egipcio formado por 3 partes: el círculo representa el mundo divino; la línea horizontal es la materia o plano manifestado, y la línea vertical se refiere al camino que cada persona debe recorrer para llegar a la divinidad.
Para Luciana, integrante de Nueva Acrópolis desde hace 4 años, el taller “no es solo un curso de cerámica, pude ver una gran sabiduría detrás”.
Este Taller de Cerámica forma parte de una serie de encuentros que permiten a cada participante conocer el origen de este arte milenario, crear piezas únicas con sus propias manos y reflexionar sobre símbolos y conceptos que orientan los estudios filosóficos de Nueva Acrópolis.