¿Os habéis preguntado alguna vez cuál es la diferencia entre renovación y repetición?

Este fue el tema de una conferencia que se llevó a cabo a mediados de febrero en Nueva Acrópolis frente a casi medio centenar de asistentes.

A diferencia de la repetición, que es casi siempre lo mismo, la renovación abarca la capacidad de crecimiento interior y de percibir la vida bajo una nueva luz. En otras palabras, la renovación o “renacimiento” de un hombre está condicionada por el desarrollo de las virtudes. Sin esto, no seríamos más que repetidores, sin ideales ni dirección clara. Parece que la única pregunta es cuándo comenzaremos nuestro viaje de renovación.