Miembros de Nueva Acrópolis en San Petersburgo (Rusia-Norte) hicieron su cuarto viaje en kayak, recorriendo el río Vuoksa durante casi 27 km.

Concebimos este viaje como un entrenamiento filosófico y nos fijamos un objetivo: aprender a superar las circunstancias externas e internas en un círculo de copensadores y percibir todo lo que sucede no como un problema sino como una aventura. Por ejemplo, cuando llueve y estás en mar abierto y no hay dónde esconderte, mientras las olas se levantan y estás en un kayak diminuto y no sabes dónde parar para descansar y el sol se está poniendo… ¿Todo esto es un problema o una aventura para ti?
Un viaje por el río es como nuestra vida en miniatura. Aprendimos a apreciar el ritmo y nos dimos cuenta de que es mejor mantenerlo constante que reanudarlo cada vez. Pasamos por rápidos del río y nos dimos cuenta de que es más fácil superar las dificultades en equipo que hacerlo solo. Y los lugares agradables llenaron nuestros corazones de Belleza.
¡Ya estamos deseando que llegue el próximo verano para hacer el quinto viaje y vivir una nueva aventura filosófica!