En honor al Día Internacional de la Madre Tierra (Ekaterimburgo, Rusia)
En honor al Día Internacional de la Madre Tierra, los voluntarios de Nueva Acrópolis en Ekaterimburgo organizaron un festival ambiental llamado “De la diversidad a la unidad”.
En diferentes comunidades ecológicas podemos ver ejemplos de trabajo en equipo bien coordinado, relaciones bien establecidas entre miembros, cooperación mutuamente beneficiosa y la capacidad de esperar el buen momento. Cuanta más diversidad podamos observar en una comunidad, mejores conexiones pueden existir entre participantes tan diferentes.
En Ekaterimburgo se realizan muchos proyectos e iniciativas ecológicos, algunos apagan incendios, otros plantan árboles o realizan caminatas ecológicas y limpian de basura los bosques y las orillas de los ríos. Cada uno hace sus “pequeñas” cosas, y de esta manera todos juntos ayudamos a la Tierra. Y como nos enseña la filosofía y las leyes de la naturaleza, cuanto mejor interactuemos entre nosotros, más fuertes serán nuestros vínculos y más sostenible será nuestra ayuda.
Durante el festival los participantes de los proyectos ecológicos se reunieron y presentaron su trabajo a los ciudadanos.
Los invitados al festival tuvieron la oportunidad de participar en los juegos “Salid del fuego” y “Los guardianes de la Tierra”, donde aprendieron cómo crear sus propios proyectos ecológicos y que el Ser Humano es una parte relevante del sistema ecológico. Por eso es muy importante que las personas presten atención no sólo a la limpieza del mundo que nos rodea, sino también a la pureza de las emociones y pensamientos dentro de nosotros mismos.
Todos intentaron venir al festival con sus pequeñas ofrendas para la Madre Tierra, que en el futuro pueden convertirse en un nuevo hábito ecológico.