En el festival del Día de la Madre Tierra, Nueva Acrópolis llevó a cabo varios proyectos ambientales en la ciudad para ayudar a las plantas y los animales (Ekaterimburgo, Rusia)
En el Día de la Madre Tierra, Nueva Acrópolis organizó varios proyectos ambientales en la ciudad para ayudar a las plantas y los animales. Así nació el lema del festival: “De la diversidad a la unidad”.
Intentamos ver la totalidad de nuestra Tierra tras los problemas ambientales que resolvíamos, y comprender que al plantar un árbol en un lugar donde se han quemado, o cuidar un perro en un refugio, ayudamos a nuestro planeta en su conjunto.
En las protectoras de perros, limpiamos y reparamos los recintos, limpiamos el patio para que paseen y brindamos atención y cuidado a 150 perros.
Y en el bosque, junto con el Departamento Forestal de Ekaterimburgo y los proyectos ecológicos “Ecodozor” y “Donamos el Bosque”, se plantaron más de 2000 abetos y alerces en el lugar donde se talaban ilegalmente.
Mientras hacíamos estos trabajos, soñábamos con lo que nuestra ciudad y toda nuestra Tierra podría llegar a ser si cada uno de sus habitantes actuara de esta manera.