Día especial para los miembros de Nueva Acrópolis, nos reunimos en la estación de Keikyu Maborikaigan por la mañana y recorrimos la costa mientras recolectamos basura de las calles como colillas de cigarrillos y varios papeles.
Al llegar a la orilla, nos impresionó cómo las algas actúan como un filtro natural y evitan que la basura se extienda más. Nos dimos cuenta de que la naturaleza está viva entre la basura que tiramos los humanos.
Después de limpiar la costa durante parte del día, nos dirigimos a un hermoso parque verde y hablamos sobre lo que significa el voluntariado para cada uno de nosotros. Los voluntarios a veces se ven de manera incorrecta, como recursos humanos que se pueden utilizar de forma gratuita, pero la etimología de “voluntario” proviene de la palabra latina “Voluntarius”, que significa libre albedrío. Así que se hablaba del voluntariado, entendido de esa manera, como una forma de vida, más que como una simple actividad.
Algunos participantes trajeron el ukelele, así que cantamos y bailamos, y terminó como una fiesta pasada de moda.
Gracias de nuevo a todos los que participaron. Seguiremos realizando encuentros para pensar desde una perspectiva filosófica sobre la naturaleza.